Alianza a la Democracia Cristiana Europea y Sobre el Estado clasista de los Técnicos Medios en Cuba. La dictadura de clase: ¿Cuándo y cómo se instauró?

Ciro Pedro A de Posse Y León. Vocero del JEdE. Reino Espiritual de Yave.

La Habana, 27 de marzo de 2016. Lázaro I Maxilimiano (Andrés Amian Gómez) orienta al parlamento europeo sobre la situación política en Cuba y cómo superarla.

Al discutir estos aspectos teóricos con el Partido Comunista de Cuba ellos preguntan: ‘¿Quién te apoya? Si representaras a una organización internacional podríamos negociar contigo. Si eres tú solo, no tiene sentido que hagamos pacto, porque lo que dices son solo entelequias tuyas.’

Gómez alega que la solución al problema de Cuba, pasa porque la Democracia Cristiana Europea lo reconozca como su representante oficial en Cuba.

“Raúl y Fidel estaban vinculados a la internacional comunista (dirigida por la PCUS) desde 1948 o al menos desde 1951, ¡ocho años antes de ser Jefe de Estado!, según reconoció el Comandante en Jefe en el libro Fidel y la Religión. Luego, según Nicolás Maduro, Hugo Chavez, hizo pacto con Fidel Castro desde 1994, y ganó las elecciones en Venezuela en solo cinco años después. Ellos no pactarán con un individuo, pero no me pueden criticar que yo pertenezca a la Democracia Cristiana Europea, y si soy reconocido como miembro oficial de esa agrupación política internacional, entonces ellos sí negociarán conmigo oficialmente y convocarán a la II Conferencia Nacional del Partido, para autorizar el partido demócrata cristiano en Cuba.” Aseguró Andrés Amian Gómez, delegado de la institución religiosa Partido Revolucionario Cubano “José Martí”.

La definición leninista de clase social establece que la forma en la que las personas se relacionan con los medios sociales de producción es lo que define la pertenencia a una u otra clase social.

Dentro del sistema de relaciones sociales que determinan la formación económico social (FES) se establece que las “relaciones de propiedad” son las más importantes de las tres. Las otras son las “relaciones de producción” y las “relaciones de distribución”.

La Constitución de la República de Cuba de 1976 establecía que Cuba era un Estado de trabajadores manuales e intelectuales, donde existía solamente la propiedad social socialista de todo el pueblo sobre (todos) los medios de producción (salvo excepciones minoritarias de otras formas de propiedad que no agrupaban masa sino solo grupos aislados).

Esto hacía que tanto los trabajadores manuales como los intelectuales fueran trabajadores estatales, y de esta manera todos se relacionaban con los medios sociales de producción de la misma manera, por lo tanto eran una misma clase social.

Sin embargo, las modificaciones de 1992 a la Constitución introdujo la propiedad familiar sobre los medios sociales de producción y se autorizó la figura del Trabajador por Cuenta Propia y las Cooperativas (aunque ya existían en el sector agropecuario) comienza a tomar importancia de masa con la extensión al sector no agropecuario ya que aumenta importantemente el número de trabajadores vinculadas a esta forma de propiedad.

Con la llegada de Raúl Castro al Poder, y el llamamiento al análisis crítico de la sociedad cubana, se impulsa la clase social de los trabajadores por cuenta propia, la cual recibe estímulos de muchos tipos, y termina por percibir ingresos medios superiores a los de los trabajadores estatales.

Sin embargo, el Estado establece un listado de cuáles son las actividades autorizadas a ser ejercidas en la modalidad de trabajador por cuenta propia, y no existe la opción de que nadie registre una iniciativa que no esté contenida entre los oficial autorizados.

De esta manera, la iniciativa científica e intelectual, queda automáticamente discriminada, ya que se autoriza lo que previamente se conoce y que ha llegado a ser reconocido por el Estado como socialmente útil.

Solo dentro del ámbito Estatal se puede desarrollar la iniciativa científica, de manera que la creatividad sofisticada y el genio queda obligado a entregar el fruto de sus creaciones al Estado, y cobrar a cambio solo un salario lastrado por una estricta política de austeridad pública, justificada en la constitucionalidad de las gratuidades a los servicios médicos y a la educación, así como la necesidad de mantener gastos militares (incluyendo la tecnología de inteligencia) para garantizar la soberanía del Estado.

Por otra parte, la Ley de Ajuste Cubano, de los EE.UU., estimula la emigración ilegal, a la cual suelen recurrir precisamente las personas cuya instrucción es más bien de nivel medio y en muy pocos casos los universitarios, profesionales o intelectuales y por lo tanto, aparece un flujo de retroalimentación financiera proveniente de los EE.UU., que incide sobre los sectores de trabajadores manuales.

Dentro de los trabajadores manuales, los Técnicos Medios, son la vanguardia, los más capacitados, y lideran los grupos.

En Cuba las carreras de técnico medio se suelen estudiar al salir del 9no grado y han solido durar cuatro años.

Las carreras universitarias se suelen estudiar al salir del 12mo grado, y suelen durar 5 años.

Ha existido un reclamo social por parte de los Técnicos Medios, diciendo que ellos solo estudiaron un año menos que los universitarios, porque las carreras de Técnicos Medios son de cuatro años y las de las universidades solo de cinco, “así que es casi lo mismo”.

Esta ideología ha hecho que los Técnicos Medios quienes comienzan a ganar dinero mucho más pronto que los universitarios, ya que cuando un joven que hizo pre y fue a la universidad, empieza su segundo año de estudio, ya su compañero que no hizo pre y fue al técnico medio, empezó a trabajar y ganar dinero.

La diferencia entre la formación del universitario y del técnico medio está fundamentalmente en los aspectos teóricos, filosóficos, abstractos y éticos, los técnico medios dicen que los universitarios “saben tanto que no saben hacer nada”, refiriéndose a la falta de habilidades practicas con las que ingresan en la vida laboral una vez graduados de la universidad.

Esto se asiente en Cuba, ya que aunque hubo un alto nivel de estudios, nunca hubo un alto nivel de industrialización ni de tecnificación de las empresas que conservaron en altos porcentajes las mismas tecnologías que dejaron los americanos al triunfo de la Revolución de 1959, ya que el CAME asignó a Cuba la función de proveedor de azúcar e hizo con Cuba la excepción de su teoría de la necesidad del desarrollo industrial acelerado que aplicó a todos los países de Europa del Este y a la propia Unión Soviética.